EL MAYOR REGALO DE ESTA NAVIDAD

Llega el Adviento y dentro de pocos días llegará también la Navidad. Todo empieza a tener el color y el brillo de la Navidad. Decoramos la casa, preparamos la cena, invitamos amigos y familiares, pero quizás lo más característico de la Navidad es que todos nos hacemos regalos.

Sin embargo, el regalo más grande que recibirás esta Navidad no será uno de tu familia o de tus amigos, sino el que Dios te va a dar.  Además, este regalo es la razón de todos los otros regalos. Ese regalo que Dios te quiere dar es su Hijo Jesús.

San Juan nos habla de este regalo en uno de los pasajes más famosos de la Biblia: “Tanto amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en Él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”(Juan 3, 16).

En este texto de la Biblia encontramos cuatro grandes regalos que Jesús te quiere dar en esta Navidad.

1. Un gran amor

La oración comienza con las palabras “De tal manera amó Dios al mundo”, o sea, el primero y el mayor de los regalos es el amor de Dios. Todo comenzó porque Dios te amó,  Él te ama desde antes de la creación del mundo.

Hay muchas formas de expresar el amor:  puedes mandar una carta,  una flor, o ahora con los teléfonos, puedes enviar un mensaje con algún emoji... Pero nada puede reemplazar un decir "te amo" en persona, mirando a los ojos de la persona que amas. Pues así, Dios no se contentó con enviar una carta (la Biblia), tampoco con regalarnos las millones de flores que llenan la tierra, no se contentó con enviar representantes (los profetas). Él quiso venir personalmente a decirnos cuánto nos ama, sin importar cuánto eso le costara.

2. Un gran regalo

Pero Dios no solo nos amó, también nos dio un regalo: Su propio Hijo. San Juan dice que Dios “dio a su Hijo unigénito”.

Mientras contemplas a Jesús en el pesebre esta Navidad, pregúntate: ¿Quién es ese bebé que duerme ahí? Y responde con las palabras de San Pablo: Cristo “la imagen del Dios invisible, el primogénito de toda creación” (Colosenses 1, 15). Nunca nos cansaremos de contemplar la profundidad y grandeza de este regalo. 

Pero ese niño no siempre seguirá siendo un niño.  Jesús viene a cumplir una misión muy difícil, viene a pagar con su vida nuestros pecados. Por eso, San Pablo dice también: “Al que no conoció pecado, Dios lo hizo pecado por nosotros; para que fuésemos hechos justicia de Dios” (Efesios 5, 21).

3. Una gran propuesta

En el mundo hay muchas propuestas en las que das algo y recibes algo a cambio. Pienso, por ejemplo, en los catálogos de Navidad. Tantas cosas que puedes tener a cambio de algo de dinero. Pero la propuesta de Dios es infinitamente mejor.

San Juan lo expresa así: "Quien cree en él no perecerá".  Esta es la propuesta de Dios. Si creemos en Jesús seremos libres de la muerte. Como el buen ladrón que fue crucificado junto a Jesús: Él creyó y escuchó de Jesus estas palabras: “Hoy estarás conmigo en el paraíso” (Lucas 23, 43).

Y la propuesta de Dios es para todos.  Juan dice: "todo aquel que cree". En ese "todo aquel" está incluido también usted. La salvación que Dios nos trae en esta Navidad es para todos, también para aquellos que se sienten alejados de Dios, indignos de Él, abandonados por Dios. Jesús decía a los judíos: “No vine a juzgar al mundo, sino a salvar al mundo”(Juan 12, 47). 

4. Una gran promesa

Finalmente, Dios nos hace una gran promesa: la vida eterna. ¿En qué consiste esta vida eterna? Mucho más que vivir para siempre. Esto también está incluido, pero la vida eterna que Jesús nos ofrece es “tridimensional” y comienza aquí en la tierra.

Las tres dimensiones son: 

1. Paz y perdón para el pasado. 
2. Propósito para el presente. 
3. Certeza de un Reino Eterno para el futuro. 

¿En cuántas de estas dimensiones vives? ¿Sigues atrapado en los errores del pasado? ¿O vives una vida vacía y sin sentido en el presente? ¿O vives con miedo del futuro?

Estos son algunos de los regalos que Dios quiere hacerte en esta Navidad y todos los recibimos a través del nacimiento de Jesús: un gran amor, un gran regalo, una gran propuesta y una gran promesa. Prepara tu corazón para esta Navidad adquiriendo el libro El gran Regalo de Navidad. Así, cada vez que recibas un regalo en esta Navidad, te acordarás que el Regalo que Dios te ha dado es el más importante de todos.

No dejes de comprar en este Adviento el libro El gran Regalo de Navidad. De nada serviría que Jesús naciese mil veces en Belén, si no nace también en tu corazón. 

Rodrigo Hurtado, L.C.

Legionarios de Cristo

São Paulo, Brasil